A diario realizamos diversos movimientos que implican el cambio de posiciones de nuestro cuerpo, sin embargo vale la pena preguntarse: ¿lo estamos hacemos bien?
La respuesta a esa inquietud la podemos encontrar explorando todo lo relacionado con la higiene postural, que es el conjunto de buenas prácticas que buscan mantener la correcta posición del cuerpo ya sea en movimiento o en quietud, evitando posibles lesiones y protegiendo la columna vertebral de molestos dolores.
A continuación unas recomendaciones que le ayudarán a mejorar su higiene postural:
En la oficina
- Utilice un escritorio a la altura adecuada, debe quedar a la altura de los codos.
- Mantenga el tronco derecho y la espalda lumbar apoyada en el soporte del asiento.
- Realice pausas activas 10 a 15 minutos al día.
Al conducir
- Mantenga la espalda bien apoyada contra el asiento.
- Aleje o acerque el asiento para evitar inclinarse demasiado.
- Conduzca con el cuello derecho de manera que vea de frente el camino.
Cuando lea
- Ubíquese en una silla con soporte para la espalda lumbar.
- Sostenga el libro al nivel de los ojos de manera que no incline mucho la cabeza.
- El libro debe estar a mínimo 30 cm de la vista y utilice un lugar bien iluminado.
Al cargar objetos
- Inclínese al nivel del objeto, doblando las rodillas.
- Levante el objeto apoyándolo en muslos, rodillas y hacia el pecho.
- Enderece el cuerpo lentamente llevando el objeto sobre el vientre y tórax.
- No incline la espalda hacia adelante o atrás, puede lesionarse.
Para los niños
- Se recomienda que usen maletas de dos correas de manera que el peso sea equilibrado en ambos hombros.
- Enséñeles a caminar con la espalda derecha.
- Elimine el sobrepeso de su maleta.
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