Diabetes: enfermedad coronaria y gestación

Agosto 27, 2020
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La diabetes y la enfermedad coronaria tienen una estrecha relación, ya que la primera puede ser un factor importante que desencadene enfermedades cardíacas como la arteriosclerosis, que es la alteración vascular que se caracteriza por el endurecimiento, aumento del grosor y pérdida de elasticidad de las paredes arteriales. Así como otros factores de riesgo de la enfermedad coronaria como el sedentarismo y la elevada ingesta de alimentos ultraprocesados (bebidas azucaradas, embutidos, etc), facilitan la alteración del metabolismo permitiendo la aparición de diabetes.

La gestación es un estado fisiológico supremamente exigente para el organismo de la mujer, el hecho de tener que suplir una gran cantidad de sustratos energéticos para esa nueva vida que se está formando hace que algunos organismos que están susceptibles puedan desencadenar una diabetes que pudiese estar latente.

Esta condición es facilitada por antecedentes familiares o por condiciones de base de la mujer gestante, por ejemplo: una mujer que desde antes de la gestación sea muy sedentaria, que tenga una condición de obesidad importante y que sufra algunas alteraciones especificas del tracto genitourinario como la endometriosis (el tejido que recubre el interior del útero crece también en la parte exterior de este órgano),  con mucha facilidad puede desencadenar diabetes durante la gestación y facilita que posteriormente en un mediano o largo plazo desencadene en una diabetes mellitus, la cual requiere un manejo y un tratamiento para el resto de la vida.

 

Recomendaciones generales

De manera que cuidar de nuestros hábitos y estilos de vida es una de las recomendaciones más importantes para la prevención ya que esta enfermedad puede darse tanto en jóvenes como en adultos mayores.

 

  • Es fundamental realizar actividad física, se recomienda 30 minutos de actividad aeróbica y ejercicio cardiovascular por día y posteriormente ir subiendo a 60 minutos acompañado de con una hidratación adecuada.

 

  • Disminuir la ingesta de sal, ya que esta predispone a la hipertensión y a la arteriosclerosis.

 

  • Evitar al máximo la ingesta de carbohidratos y grasas ultraprocesadas, los carbohidratos tienen que ser de alto valor nutricional como son: frutas, verduras, algunos frutos secos y cereales integrales que brinden energía al organismo para disminuir los picos hiperglucémicos (elevaciones bruscas de los niveles de azúcar).

 

  • Llevar una ingesta balanceada de alimentos durante el día, las personas con diabetes no pueden estar largos periodos de tiempo en ayudas porque la respuesta compensatoria del organismo facilita la hiperglucemia y también predispone a la hipoglucemia (disminuciones abruptas de los niveles de azúcar). Cualquiera de los dos extremos puede ser potencialmente peligroso.

 

  • Mantener un patrón adecuado de sueño por lo menos de 7 horas continuas, esto favorece el equilibrio de algunas hormonas que intervienen en el metabolismo del azúcar.

 

  • El control adecuado del estrés, durante la jornada laboral realice las pausas activas, un inadecuado manejo de este desencadena unas hormonas que facilitan que la glucemia se eleve.

 

Vea también ¿Qué es la diabetes? 

 

Este artículo contó con la asesoría del Dr. Erwing Arturo Vargas Saenz, cardiólogo de la Clínica Shaio.