Enfermedades cerebrovasculares: qué son y cómo prevenirlas

Enero 13, 2022

Las enfermedades cerebrovasculares son un conjunto de lesiones del cerebro que se producen por la alteración en la circulación de la sangre. De acuerdo con la OMS, son la tercera causa de muerte, la segunda causa de discapacidad en adulto y la segunda causa de demencia en el mundo. Las neuronas utilizan el oxígeno y la glucosa como fuentes de energía y cuando existe una alteración en el flujo de sangre que aporta esos nutrientes a las neuronas, estas comienzan a sufrir afectaciones.

 

Clasificación y tipos de enfermedades cerebrovasculares

Estas enfermedades pueden dividirse en isquemia, que se refiere a la obstrucción de un vaso, y hemorragia o derrame, la cual corresponde a la ruptura de un vaso cerebral.

 

Aunque el ataque cerebrovascular es la enfermedad más conocida, el espectro de la enfermedad vascular cerebral es muy amplio. Existen otras patologías como:

 

  • Enfermedad de pequeño vaso: una enfermedad obstructiva que altera la microcirculación y está muy relacionada con la hipertensión arterial y la aterosclerosis (acumulación de grasas en las paredes de las arterias). 

 

  • Demencia vascular: es un deterioro cognitivo que surge por la presencia de lesiones cerebrales.

 

  • Malformación aneurismática: es un defecto de la pared de una arteria que puede presentarse en personas jóvenes.No solo las arterias están comprometidas en la enfermedad vascular cerebral, las venas también se ven afectadas por enfermedades como:

 

  • Trombosis venosa: formación de un coágulo de sangre en el interior de una vena que normalmente genera hinchazón en las piernas.

 

  • Tromboembolismo pulmonar: taponamiento de una arteria pulmonar que procede de un coágulo formado en las venas de los miembros inferiores.

 

Factores de riesgo de las enfermedades cerebrovasculares

Los factores de riesgo son situaciones clínicas que de no controlarse aumentan la probabilidad de sufrir una enfermedad. En el caso de las (ECV) estos son:

 

No modificables

Existen factores no modificables como la edad, el sexo y la raza. Respecto al primero, aunque estas enfermedades son más frecuentes en pacientes de edad, los jóvenes también pueden padecerlas. Por ejemplo, los casos de accidente cerebrovascular en jóvenes van en aumento debido a que los factores de riesgo como sobrepeso u obesidad han ido migrando a estas poblaciones.

 

Aunque no son tan comunes, existen angiopatías (enfermedades de los vasos cerebrales) que están genéticamente determinadas y afectan a poblaciones más jóvenes.

 

Modificables

Los factores modificables pueden clasificarse en tradicionales y emergentes. De los tradicionales el más importante es la hipertensión arterial. Otros son las enfermedades cardíacas, las alteraciones en el ritmo cardíaco, la obesidad, el consumo de alcohol, los malos hábitos nutricionales y la diabetes.

 

También hay factores de riesgo que están emergiendo, uno de ellos es el sueño. Hay patologías del sueño, sobre todo patologías del ritmo respiratorio como la apnea obstructiva del sueño en donde es más difícil el control de factores de riesgo modificables como la hipertensión arterial, además, aumenta el riesgo de sufrir arritmias cardíacas que pueden desencadenar una trombosis cerebral. La contaminación, sobre todo en la concentración de elementos como el plomo, son causas que se están estudiando; el consumo de cocaína puede generar trombosis cerebrales; por último, aunque no es tan frecuente, los antigripales pueden generar hemorragias intracraneales (incluso con una pequeña dosis). 

 

Síntomas de enfermedades cerebrovasculares

La característica clínica principal de un ataque cerebrovascular, de una trombosis o un derrame cerebral es su inicio súbito, el paciente está bien y de un momento a otro presenta:

  • Dificultad para hablar o expresarse

  • Un lado de su cuerpo se paraliza

  • Se le tuerce la cara

 

La presencia de un solo de estos síntomas aumenta la probabilidad de tener una urgencia cerebrovascular.

Hay otros síntomas relevantes como:

  • El vértigo agudo, no todos los vértigos son trombosis cerebral pero un paciente con factores de riesgo como hipertensión, diabetes, enfermedad cardíaca o colesterol elevado que presente un vértigo agudo, podría estar sufriendo una trombosis cerebral.

  • Un dolor de cabeza abrupto y de gran intensidad que se manifieste, por ejemplo, durante un baño de agua fría o una relación sexual. Este se conoce como cefalea tipo trueno y en estos casos lo más importante es descartar que ese dolor se haya originado por una malformación arterial, un aneurisma o una trombosis venosa cerebral.

  • Fenómenos de isquemia cerebral menores conocidos como ataque isquémico transitorio, lo cual es un síntoma inicial de un infarto cerebral que debe prender las alarmas. El paciente está  realizando alguna actividad, por ejemplo almorzar, y de pronto pierde la fuerza en la mano derecha o tiene dificultad para encontrar las palabras. Esto puede durar 5 o 10 minutos.

 

Acciones de prevención de enfermedades cerebrovasculares

Saber que el cerebro también se infarta y no solo el corazón, pues la obstrucción de un vaso sanguíneo en el cerebro también puede presentarse. 

 

Tener un estilo de vida sano, promoverlo en nuestras familias y mantener controlados los factores de riesgo es una medida esencial para reducir el riesgo de padecer estas enfermedades. Por eso es importante:

  • Controlar la presión arterial.

  • Controlar la diabetes.

  • Mantener un peso saludable.

  • Descansar lo suficiente.

  • Cuidar los hábitos nutricionales desde edades tempranas y regular los niveles de colesterol.

 

Conocer los síntomas y actuar a tiempo hace parte de un proceso de educación en la comunidad, para que ante la presencia de signos de alarma tomen acciones inmediatas dirigiéndose a un servicio de urgencias de una entidad especializada en el manejo de eventos cerebrovasculares, ya que inicia una carrera contra el tiempo para brindar un tratamiento oportuno que disminuya la discapacidad y mortalidad. Si una urgencia cerebrovascular no es tratada a tiempo, podría generar secuelas irreversibles con un alto impacto personal, social y familiar.

 

Nuestro servicio de Neurología

En la Fundación Clínica Shaio contamos con un grupo de alta experiencia y tecnología de punta para la prevención y el manejo integral de enfermedades cerebrovasculares.

 

Este artículo contó con la asesoría del Dr. Javier Torres Zafra, neurólogo.

 

Para más información: 

https://www.shaio.org/cerebro 

https://www.shaio.org/como-actuar-frente-a-un-acv