Lo que debe saber acerca de tumores cerebrales

Junio 09, 2022
Render 3d de un historial médico con figura masculina y cerebro resaltado

Hay dos formas en las que se pueden clasificar los tumores cerebrales: Los grados I y II se denominan como benignos o de bajo grado y corresponden a lesiones que crecen en el cerebro de manera lenta, tiene baja proliferación y alta probabilidad de cura, esto no quiere decir que no requieran atención o tratamiento. Los grados III y IV se clasifican como malignos o de alto grado, ya que tiene una alta probabilidad de diseminarse con rapidez a otros órganos, formar metástasis y pueden producir la muerte.

 

¿Cuáles son las causas para que un tumor sea benigno o maligno?

No hay manera de saber las causas para que un tumor sea “bueno o malo”, o lo que inicialmente era benigno se convierta en algo más grave. Los tumores pueden surgir por múltiples factores que a la larga producen cambios en las células, generando que pierdan el autocontrol y empiecen a reproducirse de una manera anormal, estás se llaman comúnmente como células cancerígenas o células tumorales.

 

Existen algunos tipos de cáncer que pueden ocasionar metástasis en el cerebro con mayor prominencia, como el cáncer de pulmón, el cáncer de mama y el melanoma. Pero aunque no haya una causa específica existen algunos factores de riesgo identificados por la American Brain Tumor Association, que aumentan la probabilidad de tener un tumor cerebral:

  • Genéticos o hereditarios

  • Ambientales como la exposición a contaminantes, productos químicos o industriales

  • Lesiones en la cabeza y convulsiones

  • Exposición a infecciones, virus y alérgenos

 

¿Los tumores cerebrales pueden ser congénitos?

Desafortunadamente existen algunos tumores en niños, que vienen de problemas genéticos desde su formación y que tiene mayor predisposición de desarrollarlos, es por esta razón que hay casos que desde muy corta edad presentan tumores en el cerebro, columna o médula espinal en su mayoría malignos.

 

A diferencia de los adultos donde se puede detectar y tratar a tiempo ya sea un tumor benigno o maligno, en los niños es mucho más complicado por su fuerte componente genético.

 

Tipificación de los tumores cerebrales:

Hay infinidad de tumores cerebrales y al igual que los síntomas son muy diferentes para cada tipo de persona, pero según la Organización Mundial de la Salud existen tumores más comunes que otros:

 

  • Meningiomas: son tumores que surgen de las membranas que rodean el cerebro y la médula espinal (meninges) y están clasificados como benignos.

  • Schwannoma o neurinoma del acústico: son tumores benignos que se presentan en los nervios internos del oído, los cuales controlan el equilibrio y la audición.

  • Gliomas: estos tumores comienzan en el cerebro o la médula espinal, y comprenden astrocitomas, ependimomas, glioblastomas, oligoastrocitomas y oligodendrogliomas.

  • Adenomas hipofisarios: son tumores que nacen en la glándula pituitaria o en la base del cerebro afectado las hormonas del crecimiento causando efectos en el cuerpo.

  • Craneofaringiomas: son tumores poco frecuentes que crecen cerca de la glándula pituitaria del cerebro, la cual secreta hormonas que controlan muchas funciones corporales. A medida que el craneofaringioma crece, puede afectar a la glándula pituitaria y a otras estructuras cercanas al cerebro.

 

¿Qué síntomas existen para detectar un tumor cerebral?

Es muy difícil identificar síntomas de un tumor cerebral y detectarlo, ya que depende de muchos factores como el tamaño del tumor, el lugar, la tasa de crecimiento y en definitiva es diferente para cada persona. Pero existen algunos signos de alarma que pueden dar a entender que algo no está bien:

 

  • Dolores de cabeza frecuentes, intensos y anormales

  • Náuseas o vómito sin ninguna razón

  • Problemas en la vista, el oído o el habla

  • Dificultad en el equilibrio

  • Problemas para el habla

  • Cambios de personalidad

 

Otra factor muy frecuente cuando existen tumores cerebrales son las convulsiones, si una persona adulta que nunca ha convulsionado y de un momento para otro presenta una crisis, lo primero que hay que descartar es que tenga una lesión en el cerebro.

 

¿Qué tratamientos existen para los tumores cerebrales?

El tratamiento de cada tumor depende del tamaño, del tipo de tumor, el tipo de cáncer, el tejido cerebral comprometido y demás factores, los más conocidos son la cirugía, radioterapia, radiocirugía y quimioterapia que se combinan con tratamiento farmacológico.

 

En la Clínica Shaio, la cirugía y la radiocirugía son los pilares en los que basamos todos los tratamientos para enfermedades cerebrales; en nuestra Unidad de Neurointervencionismo nos especializamos en técnicas mínimamente invasivas con equipos de última tecnología para tratar tumores cerebrales y otras patologías cerebrovasculares de alta complejidad como los aneurismas intracraneales, angioplastia química y/o mecánica y accidente cerebro vascular (ACV) agudo: Unidad de Stroke. 

 

Contamos con lo último en tecnología para el diagnóstico y estudio de tumores cerebrales como la resonancia magnética cerebral, utilizada en nuestros pacientes candidatos a la radiocirugía con Gamma Knife Perfexion, una terapia que permite a los médicos localizar y tratar tumores, metástasis y malformaciones vasculares en el cerebro sin cirugía, administrando altas dosis de radiación ionizante (rayos gamma) con total precisión y mínimos efectos secundarios. Este es un procedimiento ambulatorio que no requiere hospitalización ni estancia en la UCI y puede ayudar a aliviar los síntomas.

 

Este artículo contó con la asesoría de Dr. Andrés Fonnegra, Neurocirujano y  Neurointervencionista

 

Para más información:

https://www.shaio.org/metastasis-cerebral-tratamiento-gamma-knife

https://www.shaio.org/prensa/ofrecemos-una-mejor-opcion-en-el-tratamiento-de-tumores-de-cabeza

https://www.shaio.org/radioneurocirugia-metastasis

https://www.shaio.org/parkinson-tratamiento-quirurgico

https://www.shaio.org/unidad-de-radioneurocirugia-gamma-knife-perfexion

https://www.shaio.org/unidad-de-neurointervencionismo