Llega la temporada de lluvias y con ella el problema de las enfermedades respiratorias, gripe, rinitis, influenza y hasta COVID-19, están a la orden del día, por lo que se vuelve la principal causa de visita a los servicios de urgencia y un motivo muy frecuente de consultas médicas. Por lo que le preguntamos al Dr. Juan Pablo Osorio Lombana, médico infectólogo sobre cómo se comporta un pico respiratorio y cómo prevenir contagiarse de una enfermedad respiratoria.
Para entender un poco este fenómeno, es importante entender qué son los picos respiratorios, estos son momentos epidemiológicos de mayor transmisión de enfermedades respiratorias producidas principalmente por virus.
Estas temporadas de contagio ocurren principalmente en épocas de lluvia, por lo que se puede presentar entre los meses de abril a mayo, y entre octubre y noviembre, sin embargo, los cambios climáticos, el comportamiento de las lluvias en países tropicales y otros fenómenos naturales, hacen que cada vez sea más difícil predecir cuáles van a ser esas temporadas del año en las que se van a disparar los contagios por enfermedades respiratorias, también se vuelve poco predecible qué tipo de virus pueda ser el que circule; en países con estaciones, el pico respiratorio usualmente se relaciona con el invierno.
¿Ha cambiado el comportamiento de los picos respiratorios?
Dependiendo de los virus que circulen, el comportamiento del pico respiratorio puede cambiar; por ejemplo, pueden circular virus como rhinovirus, virus respiratorio sincitial, influenza, COVID-19, que se transmiten de manera similar, con predominancia de alguno de ellos, pero todos susceptibles a medidas de prevención comunes que aprendimos durante la pandemia por SARS-CoV-2.
Normalmente las personas que han tenido contacto previo con virus respiratorios no quedan protegidas a largo plazo contra otras infecciones respiratorias; la inmunidad contra los virus respiratorios puede ser transitoria dado que los virus mutan rápidamente, evitando la respuesta inmune, por lo que debemos estar atentos a las medidas de prevención y a actualizar nuestros esquemas de vacunación. Los cambios en las características de los virus respiratorios pueden generar picos de transmisión y casos graves.
En conclusión, los picos cambian de temporada a temporada dependiendo de los virus que circulen y la intensidad de su transmisión en población susceptible. Por ejemplo, en tiempos de pandemia, las primeras personas que se contagiaron de SARS-CoV-2 tuvieron una respuesta al virus diferente si se compara con las personas que se contagiaron después de vacunarse o de episodios previos de infección. Esto puede suceder, de manera cíclica, con los virus respiratorios como influenza.
¿Cuáles son las infecciones que predominan en los picos respiratorios?
La enfermedad respiratoria más frecuente es el resfriado común o gripe con manifestaciones como rinofaringitis, bronquitis y laringitis y síntomas como: congestión nasal, estornudos, dolor de cabeza, dolor de garganta y cuerpo, tos, fiebre, desaliento y en ocasiones síntomas gastrointestinales como dolor abdominal o diarrea.
Lo que pasa en el cuerpo cuando nos contagiamos es que el sistema inmune comienza una lucha para eliminar el virus, que usualmente se queda en el tracto respiratorio superior con una duración usual de entre 4 y 10 días. Sin embargo, en algunas personas, se pueden desarrollar cuadros más graves, que requieran hospitalización o atención médica.
¿Qué población es más propensa tener una enfermedad en los picos respiratorios?
En personas de riesgo como niños menores de 5 años, personas mayores de 65 años, pacientes con obesidad, enfermedades crónicas, inmunosuprimidos, gestantes y con alteraciones en su sistema inmune; los virus respiratorios pueden desarrollar cuadros más graves que un resfriado, con complicaciones como neumonía, falla respiratoria, miocarditis o comprometer otros órganos o sistemas, por lo que es fundamental educar a esta población sobre las estrategias de prevención de la transmisión de los virus respiratorios y enfocar los esfuerzos en optimizar sus esquemas de vacunación.
¿Qué se puede hacer para no tener enfermedad respiratoria en un pico?
Prevenir es la clave para no sufrir de una enfermedad en tiempos de pico respiratorio, la vacunación es una herramienta poderosa. Hay dos virus respiratorios que tienen vacunas disponibles, influenza y el SARS-CoV-2, por lo que actualizar el esquema de vacunación es de suma importancia. Las vacunas de influenza se tienen disponibles a partir del mes de abril, por lo que se recomienda estar atentos para aplicar la vacuna anualmente ya que protege contra las cepas circulantes. El talento humano en salud es una población muy relevante para la vacunación, ya que la exposición laboral a personas infectadas es una realidad del día a día.
El resto de los virus respiratorios se pueden prevenir con las medidas de cuidado que aprendimos durante la pandemia:
-
El lavado de manos ayuda a salvar vidas. Está demostrado que este hábito previene la transmisión de virus respiratorios y gastrointestinales, además evita la transmisión horizontal de microorganismos resistentes por lo que es una estrategia clave para combatir infecciones y enfermedades.
-
Si se tiene síntomas respiratorios, utilice tapabocas todo el tiempo y cámbielo de inmediato si se humedece con saliva o secreciones respiratorias, estornudos o tos.
-
Si tiene síntomas respiratorios, o contacto con personas que tengan síntomas respiratorios, mantenga el distanciamiento social lo más posible (nada de saludar de beso o abrazo).
-
Ventile los espacios en los cuales va a estar compartiendo con otras personas o busque espacios al aire libre para sus actividades.
-
Si puede, aíslese en casa mientras duren los síntomas respiratorios.
-
Mantenga limpia las superficies en casa y en lugares de trabajo.
-
El agua y el jabón son suficientes para eliminar los virus respiratorios, por lo que lavar la loza, la ropa o la ropa de cama de manera usual es muy apropiado.
¿Qué hacer y qué no hacer durante la enfermedad respiratoria?
-
Lo primero y más importante es que no se automedique con antibióticos. Las infecciones respiratorias son virus, por lo que no responden a los antibióticos, estos están diseñados para eliminar bacterias (las infecciones producidas por virus con o sin antibióticos van a resolver), lo que sí puede pasar al tomar antibióticos es que se puede poner en riesgo la salud por complicaciones derivadas de su uso como: efectos adversos a medicamentos, diarrea por Clostridioides difficile (bacteria que se aprovecha del desequilibrio de la flora intestinal por los antibióticos para dañar el sistema digestivo), colonización por microrganismos resistentes a los antibióticos, entre otros efectos. Por lo que es recomendable no automedicarse.
-
Lo segundo es identificar los signos de alarma para consultar al médico, como los siguientes: si la fiebre o la temperatura de su cuerpo es mayor a 38°C y dura más de 3 días, o tiene dificultad para respirar, dolor del pecho, vómito que impida comer o hidratarse, hundimiento de las costillas al respirar (en niños), tos que dura más de 2 semanas, secreción purulenta que aumenta con los días, pérdida de la conciencia o deterioro del estado general.
-
En niños, se debe consultar a urgencias si se presenta: somnolencia y/o dificultad para despertar, irritabilidad o letargia, presenta cianosis (piel o labios de color azul, morado o grisáceo), sibilancias o estridor (chillidos al respirar), convulsiones, deshidratación (ojos hundidos, piel seca, fontanela o parte blanda del cráneo hundida).
-
Para el manejo de los síntomas en casa se pueden tomar analgésicos como acetaminofén, antihistamínicos como loratadina o cetirizina y alguno antiinflamatorios como naproxeno o ibuprofeno, siempre controlando las dosis por el riesgo de toxicidad y orientado por su médico. Estos medicamentos pueden ocasionar lesión grave en el hígado, los riñones, el sistema cardiovascular, el sistema digestivo, entre otros.
-
Manténgase hidratado y aliméntese bien para que el cuerpo esté en las mejores condiciones para combatir el virus.
Tener gripe es muy común en estas épocas de lluvia, esperamos que la información sobre los virus respiratorios se transmita más rápidamente que las infecciones. Por eso le invitamos a actuar de manera responsable, para cuidar de su salud y la de los demás.
Prevenir es la acción más importante, la vacunación y las medidas de cuidado que señalamos anteriormente, son estrategias eficaces.
Para más información:
- https://www.shaio.org/recomendaciones-para-tratar-gripa
- https://www.shaio.org/enfermedades-respiratorias-en-ninos
- https://www.shaio.org/sintomas-cuidados-y-tratamientos-neumonia
- https://www.shaio.org/sintomas-y-tratamiento-asma-en-ninos
